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Hierve el agua y agrega el orégano.
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Deja reposar 5-10 minutos, cuela y endulza con miel.
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Uso: Bebe 2-3 tazas al día en caso de gripe, tos o malestar estomacal.
2. Aceite de Orégano para Hongos e Infecciones
Ingredientes:
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1/2 taza de hojas de orégano fresco.
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1/2 taza de aceite de oliva virgen.
Preparación:
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Machaca ligeramente las hojas y mézclalas con el aceite en un frasco de vidrio.
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Deja macerar 2 semanas en un lugar oscuro, luego cuela.
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Uso: Aplica sobre hongos en uñas o piel (diluye con un poco de aceite portador si es sensible).
3. Infusión de Orégano para Dolor Menstrual
Ingredientes:
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1 cucharadita de orégano seco.
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1 rodaja de jengibre fresco.
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1 taza de agua.
Preparación:
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Hierve el agua con el jengibre, luego añade el orégano y deja infusionar.
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Uso: Toma 1-2 tazas al día durante el ciclo menstrual.
Indicaciones y Precauciones
✅ Dosis recomendada:
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En té: 2-3 tazas máximo al día.
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En aceite esencial: Siempre diluido (nunca ingerirlo puro sin supervisión médica).
⚠️ Contraindicaciones:
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No recomendado en embarazo (puede estimular el útero).
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Personas con alergias a plantas de la familia Lamiaceae (menta, albahaca) deben probar tolerancia primero.
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Evitar su uso prolongado (más de 3 semanas seguidas).
Conclusión
El orégano es una hierba versátil y potente que puede convertirse en tu mejor remedio casero. Desde aliviar una simple gripe hasta combatir infecciones persistentes, sus usos son tan variados como efectivos. Incorporarlo en tu dieta o como tratamiento tópico puede marcar la diferencia en tu salud de