Coloca todos los ingredientes en una olla y llévalos a ebullición a fuego medio. Una vez que el agua hierva, reduce el fuego y deja cocer durante 10 minutos. Apaga, deja reposar otros 5 minutos, cuela la infusión y, si lo deseas, endulza con miel natural para potenciar sus propiedades antibacterianas y suavizar el sabor.
Uso recomendado:
Puedes tomar esta infusión una o dos veces al día, especialmente en las mañanas o antes de dormir. Es ideal para aliviar la congestión nasal, calmar la garganta irritada y fortalecer las defensas durante cambios de estación o en épocas de mayor riesgo de infecciones.
Este té no solo es una bebida reconfortante, sino una forma natural de cuidar tu salud desde dentro. Disfrutarlo de manera regular puede convertirse en un sencillo ritual de bienestar que te acompañe en tu día a día.
