La barba de maíz, también conocida como pelo de choclo, es esa fibra sedosa de color dorado que recubre las mazorcas. Aunque muchas veces se desecha sin pensarlo, esta parte del maíz posee notables propiedades medicinales que han sido aprovechadas durante siglos en la medicina tradicional, especialmente en culturas indígenas de América Latina y Asia.
Uno de sus principales beneficios es su acción diurética natural. Consumida en forma de infusión, la barba de maíz estimula la producción de orina, lo que favorece la eliminación de toxinas acumuladas en el organismo. Esta propiedad la convierte en un excelente apoyo en casos de retención de líquidos, edemas e inflamaciones leves del sistema urinario.
Además, es muy valorada en el tratamiento y prevención de infecciones urinarias, como la cistitis. Gracias a sus compuestos antiinflamatorios y antimicrobianos, ayuda a reducir el dolor, aliviar la irritación de las vías urinarias y acelerar la recuperación. También se ha utilizado tradicionalmente como apoyo en el tratamiento de cálculos renales, ya que promueve la expulsión de arenilla y pequeños cristales que se forman en los riñones.
La barba de maíz también contiene antioxidantes naturales, como flavonoides y vitamina C, que protegen las células del cuerpo contra el daño causado por los radicales libres. Esto contribuye a la salud general del sistema cardiovascular y puede ayudar a prevenir el envejecimiento prematuro.
